Eugenia Alarcón es una de las vecinas de El Mollar que compró un loteen el año 2012 y hoy recibe cartas documentos de un estudio jurídico reclamando su terreno. “Compré un terreno en la costa 2, que fue firmado por el aval del Cacique Pastrana, y a la vez registrado. Mandaron empleados de catastro de la comuna que fueron a tomar las medidas y me dieron un número de padrón que, hasta hoy, pago los impuestos como es debido”, contó y agregó: “La posesión fue libre, pacífica y pública, y hoy un estudio jurídico me envía carta documento reclamando las tierras, diciendo que son de ellos”. Eugenia cuenta que, al igual que ella, otras 100 familias están sufriendo el mismo problema. 

En el terreno que compró de buena fe, Eugenia tomó la posesión y construyó una casa prefabricada. Durante la pandemia a Eugenia le llegaron las primeras llamadas telefónicas del estudio jurídico, pero confiando en sus papeles no le dio importancia, hasta que le llegaron las cartas documentos y hoy su caso está en una fiscalía de Monteros. “Empecé a relacionar con lo que está pasando con las tierras cercanas al dique, y con gente del barrio Malvinas, y están siendo todos notificados por la misma gente del Guasancho SRL, que está relacionado con la gente de la inmobiliaria que hoy salen a decir que son dueños de todas esas parcelas”. 

Es por esto que Eugenia pide a las autoridades que investiguen la zona: “Ellos dicen que compraron la sucesión, dicen que tienen escritura cuando a mí nunca nadie me notificó. La comuna nunca me avisó nada, yo pago en el registro inmobiliario los impuestos, ahí tengo todos mis ahorros de mi vida puesto, y hoy que me salgan con esto, por eso estoy pidiendo a las autoridades que investiguen”, manifestó.

Además, contó que las personas que le vendieron la tierra desaparecieron y que en la comuna le dicen que no tiene validez lo que pagaba en el 2012: “Esto es una inversión de la gente, es un ahorro de toda mi vida con la ayuda y la colaboración de mis padres tengo eso con mucho sacrificio y que ahora salgan esta gente a hacer esto es terrible”, arguentó.

Según cuenta Eugenia, el estudio jurídico relacionada con la inmobiliaria les pide a los propietarios que vuelvan a pagar sus terrenos o desalojen: “Están pidiendo una suma extrema, volver a pagar el terreno es imposible. Yo compré el terreno de buena fe”.

Este caso se diferencia de las ventas irregulares de tierras fiscales en la reserva La Angostura, ya que se trata de tierras privadas que fueron compradas legalmente, según contó la damnificada.

Mirá la entrevista completa de Eugenia con FM latucumana: